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Un año después de la crisis de Covid-19, poco a poco empezamos a replantearnos los viajes. Obviamente, el sector de los viajes se ha visto fuertemente afectado y ha evolucionado. Estas son las nuevas tendencias que probablemente veamos para 2021:
Después de haber vivido varios encierros, los viajeros quieren espacio, vegetación y aventura. Las grandes ciudades corren el riesgo de ser abandonadas en favor del verde. Lejos de las aglomeraciones y en busca de sentido, el campo y la montaña son destinos ideales, sobre todo porque hay muchas actividades físicas para distraerse; senderismo, ciclismo, escalada... Los pequeños pueblos también serán muy buscados. Sobre todo en caso de cierre de fronteras, mucha gente se quedará en su país pero descubrirá el patrimonio de otras regiones.
Los viajeros preferirán los destinos en los que se respeten las medidas sanitarias y sean superiores. Este parámetro influirá en la elección de la compañía aérea, el hotel o el lugar de residencia. Para evitar cualquier tipo de contaminación, se valorarán las normas sanitarias. Además, cuando un viaje implique a varias personas de diferentes hogares, seguramente se realizará previamente una prueba PCR o antigénica para tranquilizar a los viajeros, aunque no sea obligatoria.
Las agencias de viajes serán más solicitadas. En efecto, pueden producirse muchos cambios durante nuestra estancia. Repatriación, obtención de un reembolso, asesoramiento, información sobre las restricciones (pruebas, cuarentenas...): ¡los profesionales de los viajes capaces de acompañar al cliente durante todo su viaje están de moda!
La flexibilidad, un argumento clave para viajar en 2021. De hecho, muchos viajeros tienen malos recuerdos de la cancelación de sus viajes anteriores. No se trata de perder el tiempo con los servicios posventa. Se preferirán los viajes con vuelos y hoteles flexibles en las reservas. Las cancelaciones sin cargo atraen porque no hay nada que perder como cliente.
Es un momento de incertidumbre, como todos sabemos. Es difícil evaluar el futuro, organizar la planificación y tener una perspectiva de los proyectos. Por ello, las reservas de última hora serán muy solicitadas para los viajes. La falta de visibilidad anima a los viajeros a reservar en el último momento para evitar cualquier cambio y riesgo. No hay que tener prisa ni planear sobre el cometa, ¡los viajes de última hora son los más seguros!